Este año era todo perfecto, ¡demasiado bonito para ser real! Si hasta se desde hace tiempo lo que le voy a regalar a mi padre, que todos los años es el más difícil con creces. Pero este año, el destino (afortunadamente) quiso poner en mi lista un regalo más. Llevo desde octubre pensando en el regalo, siempre me ha gustado ser previsora, y a dos días de la entrega me encuentro que no ser que comprarle.
Hasta esta noche, la corbata me parecía un regalo perfecto. Pero me he dado cuenta que no lo es. Ahora me resulta impersonal y aburrido, un regalo auxilar que puede ser regalado a cualquiera por cualquiera.
El caso es que mañana es el último día y no tengo ni idea de que comprar. Y este regalo, no se por qué, es muy importante para mí. Quiero que sea uno de esos regalos que trasmita que le vas conociendo...
En fin, que mañana me toca un duro día de pensar en el que daré mil vueltas a las cosas, perderé un montón de tiempo para terminar con la corbata. Lo estoy viendo.
Por que no existira una tienda donde yo vayas y le expliques a una dependienta muy amable: necesito un regalo para una persona especial a la que todavía no conozco mucho. Todo lo que te puedo decir es que le gusta el fútbol y el rugby, y en genral todos los deportes. Juega al fútbol una vez por semana con los amigos. Se su equipo de fútbol. Tiene una consola pero no se si es la wii o la xbox, que también es blanca. Juega al golf. Es auditor y está intentando dejar de fumar, sin hacer mucho intento en ello. Su talla no la se, es muy grande.
Y con toda esta información que me den un regalo que le pueda hacer ilusión, porque yo estoy perdida. Yo sigo con lo mío.
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