Si alguna vez los guionistas de Hollywood tuviesen que hacer un guión basado en la liga española de fútbol. Sin ningún lugar a dudas, tomarían como referencia la de este año, que acaba de finalizar porque ha tenido un final de infarto, digno de las mejores películas. El final se presentaba emocionante, tres equipos (Real Madrid, Barcelona y Sevilla) llegaban muy igualados a la última jornada de liga, si uno de ellos pinchaba cualquiera de los otros podía ganar. Para dar aún más emoción a este final, los tres partidos se jugaban el mismo día y a la misma hora. Para los aficionados al fútbol la emoción estaba servida.
Es cierto que el Real Madrid llegaba con ventaja hasta aquí, pues era el único que dependía de sí mismo para ser campeón de liga. Pero cuando ha comenzado la última jornada, no todo se veía tan claro. A los quince minutos de empezar el partido en el Bernabeu, el Mallorca ha marcado un gol, mientras que el Barcelona goleaba al Nastic. Durante algo mas de una hora se sintieron campeones de liga mientras que a los aficionados madridistas les invadían los recuerdos de dos ligas perdidas en Tenerife.
Pero no era ese el final que los guionistas habían elegido para esta noche. En el segundo tiempo, dos goles de Reyes y uno de Diarra desterraban al baúl de los recuerdos los tristes finales en tenerife, y traían a Madrid el trigésimo título de Liga. Después de tres años sin títulos el Real Madrid es campeón de liga, ¡una vez más!
El final de liga más interesanrte que recuerdo y lo he tenido que vivir a miles de kilómetros, pero eso no me ha impedido: seguir el partido, sufrir, saltar de alegría y llenarme de emción cuando he visto el estadio celebrando la victoría. Han sido muchos domingos en el Bernabeu, la primera vez que fui al estadio y escuché el himno sonar por primera vez se me puso la carne de gallina... pense que con el tiempo esa reacción se me pasaría, pero nunca fue así y esta noche cuando Reyes a marcado el tercer gol, y el estadio a empezado a cantar como si fuera solo uno: campeones, campeones, campeones...se me ha vuelto a poner la piel de gallina. Lo que daría por poder ir a la Cibeles a celebralo, pero como no puedo me tomaré una pinta a la salud de mi equipo.
Lo confieso: soy madridista, el fútbol es una de mis aficiones y el Real Madrid una de mis pasiones.
