Cancún: Pirámide de Coba

Cobá fue una ciudad del Imperio Maya localizada al sureste de México, en el territorio que hoy ocupa el Estado de Quintana Roo, unos noventa kilómetros al este de Chichén Itzá (esta es la siguiente siguiente excursión que hicimos, y que también tendré crónica) y unos cuarenta al noroeste de Tulum.

La ciudad de Cobá fue edificada cerca de cinco pequeños lagos. En su apogeo tuvo una población de unos 50.000 habitantes y una extensión de ochenta kilómetros cuadrados. La mayor parte de la ciudad fue construida a mediados del período clásico de la civilización maya, entre los años 500 y 900 de nuestra era y poseía varios templos entre los cuales sobrevive la pirámide del Nohoch Mul de 42 metros de altura y 35 grados de inclinación, nos es la más inclinada pero si la más alya del Imperio Maya. Y aquí está la pirámide en cuestión, y ese punto pequeño soy yo.

No nos quedamos abajo, subimos los 120 peldaños que tiene la pirámide. La subida fue fácil, pero yo en la bajada lo pase un poco mal, porque 35 grados de inclinación se notan, de heco tuve que bajar de la mano de mi madre. Ay, que tendrán las mamis que nos da tanta seguridad. Aquí están la pruebas, esta foto me encanta.

Aquí los cuatro juntos.

Para llegar a la pirámide hay que recorrer seis kilómetro de ida y seis de vuelta por la jungla. Claro que desde que se descubrió la zona y se empezó a estudiar se han hecho caminos para llegar hasta ella y para visitar la zona. La ruta se puede hacer andando, en bici (como hicimos yo y mi padre) y la gente que no se atreva o que no se encuentre en buenas condiciones físicas la hacen en el medio de transporte que usarón mi madre y mi hermana.

En plena selva hay numerosa vegetación y diferentes tipos de árboles. Por ejemplo, hay dos de diferentes especíes que siempre crecen uno al lado del otro, el primero si lo tocas te produce una hurticaria que provoca la sensación de quemazón, y el segundo es el antídoto. ¡Si es que la naturaleza es sabia!La primera foto es de un árbol que está completamente hueco por dentro, y el de la segunda es el árbol del cual los Mayas producían el chicle, ya veís, ellos ya masticaban esa goma que a mí me vuelve loca.

Después de la ruta por Coba nos dirigimos a una especie de parque temático. por llamarlo de alguna forma, donde cominos comida típica Méjicana en medio de la naturaleza, bebí café hecho en puchero, el mejor café que he tomado en mi vida. Y luego hicimos actividades, atravesamos la selva en tirolina, cruzamos lagos en conoa y nos bañamos en un cenote.

Un cenote es una dolina inundada de origen kárstico que se encuentra en algunas cavernas muy profundas, como consecuencia de haberse derrumbado el techo de una o varias cuevas. Ahí se juntan las aguas subterráneas, formando un estanque más o menos profundo. Existen varios tipos de cenotes: a cielo abierto, semiabiertos y subterráneos o en gruta. Esta clasificación está directamente relacionada con la edad del cenote, siendo los cenotes maduros aquellos que se encuentran completamente abiertos y los más jóvenes los que todavía conservan su cúpula intacta. Como otras muchas estructuras geomorfológicas, los cenotes son estructuras transitorias, que finalmente pueden terminar rellenos y desecados, pasando a formar parte de lo que se conoce como un paleokarst. En la península de Yucatán se calculan entre 7.000 y 8.000 cenotes.

El que yo me bañe es un cenote maduro, porque se encuentra completamente descubierto. Pero también visite uno de edad media, porque no se encontraba ni completamente cerrado ni abierto del todo. Fue una experiencia única, el agua es limpia y completamente trasparente, podías apreciar las plantas y rocas del fondo perfectamente aunque se encontraban sumergidas a varios metros. Y para mi sorpresa el agua no estaba nada fría.

Después de un baño tan relajante y agradable, tocaba el regreso al hotel. No soy muy partidaría de las excursiones en grupo o guíadas, pero esta es una que recomiendo encarecidamente a todos los que visitéis la Península de Yucatán. A mi me encantó.



En el mes de abril prometí escribir un poquito más, y el inicio es bueno, el primer día del mes lo cumplo. ¡A ver si sigo así! Porque todavía me queda parte del viaje, y novedades actuales. Hoy he ido al cine, y la peli (de mi estilo) me ha encantado. Así que habrá crónica.